Romanticismo, elegancia y sencillez son algunas de las claves de las bodas rústicas, que cada vez seducen a más parejas. Si vas a pasar pronto por el altar y buscas una opción con personalidad para disfrutar de una celebración mágica, este será el mejor escenario para reunir a tus amigos y familia en un día único.

Celebrar la fiesta en un entorno relajado y de gran belleza en el que los invitados se sienten agradablemente acogidos se convierte en la opción preferida para muchos novios que desean disfrutar de la esencia de su boda sin  la ampulosidad tradicional de estas celebraciones.

Belleza natural

Grandes salones de restaurantes de lujo en grandes ciudades o lugares turísticos son el entorno habitual de muchas bodas. Nosotros te proponemos una celebración más cálida, que refleje vuestra personalidad como pareja. Colores naturales, escenarios llenos de vida y una decoración a tono con el mundo del campo serán los protagonistas de tu boda campestre.

Piénsalo así: si eres una mujer natural en tu día a día, ¿por qué no puedes serlo en tu boda? La magia de estas celebraciones está en convertir en una celebración especial la belleza natural de los novios y del escenario de la fiesta.

Decoración rústica

Estás en el campo, en plena naturaleza. Por lo tanto, debes diseñar la decoración del evento para que encaje con los colores y las texturas que te envuelven. Esta es la clave de la ambientación de una boda con estilo rústico.

Tan solo tienes que pensar en todos los detalles que caracterizan la vida en el campo, y recrearlos en los escenarios de la ceremonia y el banquete, siempre prestando atención a los más pequeños detalles. Desde el look de los novios a la disposición del banquete, todo  tendrá que estar en sintonía con el entorno natural de la celebración.

¿Y cómo vas a presentar tu gran día a tus invitados? Las invitaciones de boda de estilo rústico personalizadas serán tus mejores aliadas a la hora de comunicar la noticia de tu boda a amigos y familiares. Procura que reflejen el aire campestre que tendrá la celebración, para que tus invitados  ya empiecen a zambullirse en la esencia de la fiesta.

Mimbre, tul, arpillera, encaje y crochet son algunos de los materiales que no pueden faltar en la decoración de tu gran día. Y, por supuesto, detalles en latón, vidrio y pizarra deben inundar el escenario de la celebración. Deja volar tu imaginación para llenar el lugar del banquete de botellas y tarros de cristal, cestos de mimbre, velas y pizarras.

Por supuesto, las flores serán una de las grandes protagonistas de este día. Elige tus preferidas y algunas de temporada para inundar con sus colores y aromas todo el espacio de la celebración.

¿Y el mobiliario? En tu boda rústica no pueden faltar mesas y sillas de madera natural, que aportarán calidez al ambiente. ¿Un detalle especial? Usa etiquetas de estilo rústico para marcar el asiento de cada invitado y los diferentes espacios de la celebración. Puedes diseñarlas tu misma y llevarlas a imprimir o buscar un profesional, pero lo más importante es que sigan la estética campestre de toda la celebración.